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jueves, 12 de julio de 2012

Recuerdos en la soledad


En ocasiones el mundo da giros inesperados un día sin esperarlo te da golpes que no entiendes y realmente no alcanzas a comprender que es lo que está ocurriendo, por que sientes que tu mundo se pone de cabeza y cambia de un momento a otro, a veces las lágrimas no alcanzan para terminar de desahogarte y  se hacen mil nudos en la garganta que no desaparecen los gritos nacen y se ahogan ahí en el fondo de tu garganta, quisieras decir tantas cosas y no puedes por que hay más de una idea que quisiera salir al mismo tiempo, sientes muchas cosas que son difíciles de explicar, quisiera tanto que en este momento Vlad me abrazará y me dejara llorar, llorar hasta empapar su camisa de mis lágrimas, hasta desahogar mi alma y hasta que le sueño me venciera entre su abrazo, tengo la imagen muy clara en mi cabeza, su dulce mirada, sus brazos rodeándome y abrazándome fuerte diciendo llora tranquila que tienes todo el tiempo del mundo para sanar, un beso en la mejilla empapada de lágrimas y el mundo se vería mucho mejor, pero no es así de vez en cuando como hoy Vlad no está, y sé que su ausencia tiene un propósito no puedo depender tanto de él para desahogar todo lo que siento, en ocasiones es tan duro tener que enfrentar las cosas así  tan de repente sin que te puedas apoyar de tu ángel y tienes que aprender a asimilar las cosas por tu cuenta, entonces te das cuenta que son cosas que aún no puedes manejar del todo bien pero tienes que aprender…
Es horrible que llegue el momento de decir un breve adiós a una persona tan importante en tu vida, tener que asimilar que ya no está y que lo que duele es su ausencia q por más que quieras y lo desees con todo el corazón ya no la puedes abrazar, decirle lo mucho que la quieres y lo importante que es para ti, es tan difícil contener las lágrimas, aparentar que estas bien cuando la verdad es que te sientes sola y te das cuenta q esa persona es más importante de lo que ya era, darte cuenta que hay cosas y momentos que te hubieran encantado  disfrutar y compartir en su presencia y ya no es posible… es tan fácil decir esta en un lugar mejor ya no sufrirá… pero es tan difícil aceptarlo porque aunque en el fondo del corazón sabes que es cierto la razón no lo acepta y por qué te da miedo que un día tu memoria olvide lo que se sentía el contacto de su piel, la sensación de sus caricias, su voz, su risa, su mirada, esas palabras que te decía cuando estabas triste, cuando estabas contenta, todo…
Hace poco un amigo me dijo quizás llorar es poco para sacarlo que sientes y en este momento siento que esas palabras tienen mucho de cierto, siento tantas cosas dentro de mi pecho que no sé cómo sacarlas, algunos dicen tiempo al tiempo deja que las cosas se acomoden por si solas, algunos más me dicen no te puedo decir que no llores por qué de momento es tu desahogo, y yo … yo siento que llorar no es suficiente, porque su ausencia duele tanto y quizás más que un abrazo de Vlad lo que quisiera es un abrazo de esa persona, no recuerdo mis primera experiencias de vida con ella, pero si recuerdo muchos hermosos momentos, lamento mucho el daño que le cause con algunos actos, pero sé que en el fondo ella perdono cada una de mis faltas, creo que entendía que a veces era mi desesperación la que me llevaba a hacer tonterías, nos acompañamos durante algún tiempo, fuimos cómplices, reímos, lloramos, nos extrañamos… y ahora me toca llorar y extrañarla… pedirle que me cuide y me guíe desde el cielo que no me deje en los momentos tristes y me acompañe en cada momento de mi vida, sé que lo hará, pero de momento cuesta tanto aceptar esta realidad.



El 28 de Junio queda grabado en mi memoria y en mi corazón porque ese día perdí a mi abuela y gane un ángel, ese día comprendí que  a veces llorar no basta para expresar todo el dolor que sientes, y que en mi pecho aún se guardan muchas cosas que requieren y exigen salir.
Me costara algo de tiempo aceptar y poder enfrentar la realidad, no se cuando y no se como pero estaré bien, luchando para que mi Doñita se siga sintiendo orgullosa de mi.

Koi shiteru Doñita, toda mi vida la voy a amar, por que parte de lo que soy se lo debo a usted, por que fue una gran mujer, confidente y una excelente abuela.
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